Música colombiana moderna
Colombia es tierra de música. Las mismas montañas, desiertos y otras barreras geográficas que dan a Colombia su diversidad cultural y ecológica también han dado al país una impresionante variedad musical.
La cumbia es quizá el género más característico del país. Originada como danza de cortejo entre esclavos africanos, más tarde incorporó ritmos europeos e indígenas a la mezcla, dando a la cumbia su sonido distintivo.
La cumbia se ha extendido a otros países latinoamericanos como Argentina, México y Perú, donde se ha desviado significativamente de su sonido original y se ha mezclado con los géneros locales y los sonidos modernos de cada zona respectiva.
La canción de abajo es una cumbia tradicional llamada “La pollera colora”, una de las composiciones más icónicas de la cumbia. La versión instrumental de la canción fue lanzada por primera vez por el compositor y clarinetista Juan Madera en 1960. El cantante y compositor Wilson Choperena escribió más tarde la letra.
La siguiente canción, “Colombia tierra querida”, compuesta por Bermúdez, se toca durante cualquier acto patriótico en Colombia (especialmente en los partidos de fútbol), y puede considerarse el segundo himno nacional de Colombia.
Colombia música y danza
Colombia es un país a caballo entre el Pacífico y el Caribe, por lo que no es de extrañar que la música colombiana refleje una gran cantidad de influencias musicales que han dado lugar a un entorno musical dinámico.
En general, la música colombiana mezcla la guitarra y la estructura de las canciones de influencia española con grandes flautas gaita e instrumentos de percusión de la población indígena, mientras que su estructura de percusión y sus formas de baile proceden de África.
Colombia ha sido tradicionalmente conocida por la cumbia, un estilo musical popular en las zonas costeras, y el vallenato, más popular en los valles del este del país. En los últimos diez años, Carlos Vives ha irrumpido en la escena musical mundial con su propio estilo de música rock/vallenato.
En los años 70, los colombianos se volvieron locos por la salsa, pero el hombre que más contribuyó a crear la escena salsera de Colombia fue Julio Ernesto Estrada Rincón, conocido como “Fruko”, que con su grupo, Fruko y los Tesos, empezó a caldear las calles de la costa urbana. Aunque relativamente desconocidos al principio, Fruko y los Tesos pronto llegaron a las grandes ligas e iniciaron una gira internacional a principios de la década, cosechando fans desde su hogar en Colombia hasta España.
Música popular colombiana
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La música de Colombia es una expresión de la cultura colombiana, géneros musicales, tanto tradicionales como modernos, acordes con las características de cada región geográfica, aunque no es raro encontrar diferentes estilos musicales en una misma región. La diversidad de expresiones musicales que se encuentran en Colombia puede considerarse el resultado de una mezcla de influencias amerindias, africanas y europeas (especialmente españolas), así como americanas más modernas.
Colombia cuenta con un vibrante collage de talentos que abarca todo un espectro de ritmos, desde la música pop y la clásica hasta la salsa y el rock. La música colombiana se promueve principalmente gracias al apoyo de los mayores sellos discográficos, compañías independientes y el Gobierno de Colombia, a través del Ministerio de Cultura.
Música cumbia colombia
Si pasa algún tiempo en Colombia, seguro que oye el inconfundible sonido de un acordeón. Es el más fuerte y distintivo de los tres componentes tradicionales de la música vallenata. El vallenato comenzó como comunicación en la zona de Valledupar. Los viajeros que recorrían los pueblos colombianos, basándose en tradiciones culturales tanto europeas como africanas, utilizaban la música para transmitir mensajes de un lugar a otro. Con el tiempo, esta tradición práctica pasó a ser reconocida como la maravillosa forma de arte que también era.
Hoy se puede escuchar vallenato en las esquinas y en las salas de conciertos, por aficionados y orquestas. Grandes compositores como Rafael Escalona ayudaron a elevar el género, mientras que Carlos Vives, ganador de un Grammy, lo ha introducido en un público cada vez más mundial. Festivales como el Festival de la Leyenda Vallenata (cada abril en Valledupar, con lo mejor del vallenato colombiano e internacional) y la Cuna de Acordeones (un concepto similar, cada septiembre en Villanueva) son magníficos. Otro festival importante es el Festival Francisco el Hombre que se celebra en Riohacha cada mes de marzo, a sólo una hora y media de nuestro albergue de Palomino. Se escuche como se escuche, un viaje a Colombia es sencillamente incompleto sin música vallenata. Si te gusta beber, un acompañante clásico es Old Parr, un whisky escocés mezclado con el que verás a los lugareños compartir desinteresadamente “tragos” y chupitos entre ellos. Y un último dato curioso: junto con otro estilo clásico de música colombiana, la cumbia, el vallenato ha sido declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Fundación del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Esté atento durante la próxima edición de los Grammy Latinos para conocer a los próximos ganadores.