Educación de las niñas
Los niños y las niñas deben sentirse acogidos en un entorno de aprendizaje seguro y protegido. Los gobiernos, las escuelas, los profesores y los estudiantes tienen un papel que desempeñar para garantizar que las escuelas estén libres de violencia y discriminación y ofrezcan una educación de calidad que tenga en cuenta las cuestiones de género (Figura 16). Para conseguirlo, los gobiernos pueden elaborar planes de estudio no discriminatorios, facilitar la formación de los profesores y asegurarse de que las instalaciones sanitarias son adecuadas. Las escuelas son responsables de abordar la violencia relacionada con la escuela y de proporcionar una educación sanitaria integral. Los profesores deben seguir las normas profesionales relativas a las prácticas disciplinarias adecuadas e impartir una enseñanza imparcial. Y los alumnos deben comportarse de forma no violenta e inclusiva.
La violencia relacionada con la escuela es un problema generalizado en algunos países. La violencia puede ser física, psicológica o sexual; puede producirse en el recinto escolar, en el tránsito o en el ciberespacio; y puede incluir el acoso, el castigo corporal, el abuso verbal y emocional, la intimidación, el acoso y la agresión sexual, la actividad de las bandas y la presencia de armas entre los estudiantes. A menudo se perpetra como resultado de normas y estereotipos de género y se impone por una dinámica de poder desigual. Se calcula que, a nivel mundial, aproximadamente 246 millones de niñas y niños sufrieron alguna forma de violencia relacionada con la escuela en 2014 (UNGEI, 2017).
La educación de género en la India
El género se refiere a los roles, el comportamiento, las actividades y los atributos construidos socialmente que una sociedad determinada, en un momento y lugar determinados, considera apropiados para los hombres y las mujeres, y para los niños y las niñas, así como para las relaciones entre ellos.
Aunque existen diferencias biológicas muy marcadas entre niños y niñas y éstas pueden crear necesidades y capacidades diferentes para cada uno, estas diferencias no conducen ni justifican por sí mismas la desigualdad de estatus social o de derechos. Los distintos roles y comportamientos que se definen para niños y niñas, y para hombres y mujeres en una sociedad pueden dar lugar a desigualdades de género, es decir, a diferencias entre hombres y mujeres que favorecen sistemáticamente a un grupo.
El género puede ser un determinante clave de quién hace qué, quién tiene qué, quién decide, quién tiene poder e incluso quién recibe o no educación. En muchas sociedades, se considera que los niños son los que deben recibir educación, mientras que las niñas no.
UNICEF afirma que la igualdad de género significa que las mujeres y los hombres, y las niñas y los niños, disfrutan de los mismos derechos, recursos, oportunidades y protecciones. La desigualdad de género surge cuando en una sociedad se considera que un grupo tiene más derechos que el otro. Declaraciones internacionales como la CEDAW promueven y defienden los derechos de las mujeres, por lo que hoy en día se promueve la igualdad de género como condición fundamental para el pleno disfrute de los derechos humanos por parte de mujeres y hombres. Este derecho se reconoce como una condición para el crecimiento y el desarrollo y las organizaciones mundiales promueven la igualdad de género en su trabajo.
Plan de estudios sobre la identidad de género en las escuelas públicas
La identidad de género puede ser un tema complejo para los jóvenes. Aprender más sobre el género y el sexo y cómo nos vemos a nosotros mismos como chico/varón, chica/femenina, transgénero, intersexual o en algún punto intermedio, puede ayudar a aumentar la comprensión y ayudar a los jóvenes a establecer su propia identidad de género. Estos recursos sobre la diversidad sexual y de género y sobre la identidad de género y la transexualidad son un buen punto de partida.
Se trata de la atracción sexual y/o los sentimientos de romance que una persona siente por otra. La orientación sexual puede incluir la atracción por el mismo género (homosexualidad), por un género diferente al propio (heterosexualidad), por ambos sexos (bisexualidad), por todos los géneros (pansexualidad) o por ninguno (asexualidad). HealthLink B.C. tiene algunos buenos recursos sobre la orientación sexual, además de definiciones y enlaces a ayudas.
La sexualidad es compleja e implica muchas partes de lo que somos, nuestros valores y creencias, nuestras experiencias y relaciones, etc. La sexualidad es un término utilizado para describir la forma en que las personas se expresan como ser sexual. La sexualidad implica muchos aspectos del ser humano.
¿Qué es la educación de género?
A pesar de la igualdad formal de oportunidades educativas para mujeres y hombres, sigue habiendo enormes diferencias de género en la motivación y el rendimiento académico de los estudiantes que desembocan en las aspiraciones educativas y profesionales según el género (Kollmayer et al., 2018a). Las mujeres siguen estando infrarrepresentadas en el ámbito de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM), mientras que los hombres están infrarrepresentados en la sanidad y otros sectores de orientación social (Boniol et al., 2019; Comisión Europea, 2019). Esta infrarrepresentación comienza en la escuela, donde las chicas declaran tener un autoconcepto académico más bajo en las materias STEM que los chicos, incluso después de controlar el rendimiento, mientras que lo mismo ocurre con el autoconcepto de los chicos en lectura e idiomas (Wigfield et al., 2002; Meece et al., 2006). En general, las diferencias de género en la motivación y el rendimiento tienden a ser pequeñas en la primera infancia y en los primeros años escolares, pero se hacen cada vez más evidentes en la adolescencia (Evans et al., 2002; Hyde, 2005). Además, las diferencias de género varían en función del contexto de su investigación (Hyde, 2005), lo que indica que las prácticas de socialización pueden minimizar o exagerar las auténticas diferencias de género.