Estudios de género Sociología
Además, las creencias y actitudes culturales y religiosas tienen un grave impacto en la identidad de género y, en muchos casos, fomentan creencias estereotipadas contra las mujeres y conducen a la discriminación de género. Cuando se trata de las influencias culturales y religiosas en una sociedad con respecto a la visión de género, creo que el concepto de sexismo institucionalizado es apropiado para describir esta situación. El sexismo institucionalizado son las actitudes sexistas que mantiene la gran mayoría de las personas que viven en una sociedad en la que los estereotipos y la discriminación son la norma (Aronson, Wilson y Akert, 2011). Cuando una sociedad tiene normas específicas, las personas que viven en ella se adaptan a ellas y hacen lo mismo incluso con las normas discriminatorias. Por ejemplo, cuando una sociedad, por motivos religiosos y culturales, considera a las mujeres débiles o inferiores, las personas que viven en ella desarrollarán las mismas opiniones y actuarán en consecuencia. Esto se puede ver, por ejemplo, en muchos países musulmanes y también con diferentes grupos religiosos, incluso en nuestro propio país. Las personas tienden a ajustarse a su grupo y harán lo mismo incluso cuando incurran en conductas discriminatorias, ya que quieren encajar y ser aceptadas por su grupo, lo que se conoce como conformidad normativa (Aronson, Wilson y Akert, 2011).
¿Son biológicos los roles de género?
Este documento es una visión general de cómo se construye socialmente el género. Analiza cómo la base biológica de las diferencias entre los sexos no explica sus diferencias y desigualdades vividas. El documento examina la distinción entre sexo y género y las diferentes explicaciones que se han dado a la desigualdad casi universal entre hombres y mujeres. A continuación se analizan los regímenes de género en diferentes ámbitos de la vida social y cómo la religión y el parentesco conforman determinadas construcciones del género. Por último, el documento analiza cómo las diversas dimensiones de la estratificación social se articulan con el género y lo construyen.
Las diferencias, las desigualdades y la división del trabajo entre hombres y mujeres suelen tratarse simplemente como consecuencias de las diferencias “naturales” entre los seres humanos masculinos y femeninos. Este punto de vista es la base de la mayoría de las interpretaciones comunes de lo que significa ser hombre o mujer en cualquier sociedad y ha sido intrínseco a las visiones del mundo que prevalecen en las distintas sociedades a lo largo de gran parte de la historia de la humanidad. La idea de que las diferencias naturales entre los sexos son la fuente de todo lo que hace distintos a hombres y mujeres también ha estado profundamente arraigada en los discursos científicos.
El género es una construcción social ensayo
Este documento es una visión general de cómo se construye socialmente el género. Analiza cómo la base biológica de las diferencias entre los sexos no explica sus diferencias y desigualdades vividas. El documento examina la distinción entre sexo y género y las diferentes explicaciones que se han dado a la desigualdad casi universal entre hombres y mujeres. A continuación se analizan los regímenes de género en diferentes ámbitos de la vida social y cómo la religión y el parentesco conforman determinadas construcciones del género. Por último, el documento analiza cómo las diversas dimensiones de la estratificación social se articulan con el género y lo construyen.
Las diferencias, las desigualdades y la división del trabajo entre hombres y mujeres suelen tratarse simplemente como consecuencias de las diferencias “naturales” entre los seres humanos masculinos y femeninos. Este punto de vista es la base de la mayoría de las interpretaciones comunes de lo que significa ser hombre o mujer en cualquier sociedad y ha sido intrínseco a las visiones del mundo que prevalecen en las distintas sociedades a lo largo de gran parte de la historia de la humanidad. La idea de que las diferencias naturales entre los sexos son la fuente de todo lo que hace distintos a hombres y mujeres también ha estado profundamente arraigada en los discursos científicos.
Ejemplos de constructos sociales
¿Qué significa ser “heterosexual” en la sociedad estadounidense contemporánea? ¿Significaba lo mismo a finales del siglo XIX? Como muestra el historiador de la sexualidad humana Jonathon Ned Katz en The Invention of Heterosexuality (1999), la palabra “heterosexual” fue acuñada originalmente por el Dr. James Kiernan en 1892, pero su significado y uso diferían drásticamente de la interpretación contemporánea del término. Kiernan pensaba que los “hetero-sexuales” no se definían por su atracción hacia el sexo opuesto, sino por sus “inclinaciones hacia ambos sexos”. Además, Kiernan pensaba en el heterosexual como alguien que “traicionaba inclinaciones hacia ‘métodos anormales de gratificación'” (Katz 1995). En otras palabras, los heterosexuales eran aquellos que se sentían atraídos por ambos sexos y practicaban el sexo por placer, no para reproducirse. Katz señala además que esta definición del heterosexual perduró en las culturas de clase media de Estados Unidos hasta la década de 1920, y luego pasó por varias reformulaciones radicales hasta el uso actual.